sábado, 23 de mayo de 2020

Para anotar.

Sumergidos en la que contemporáneamente llamamos Hiper industria Cultural, se encuentra el mundo de hoy, cuando hemos pasado de la cuidad letrada a la Ciudad Virtual, el Ser Humano es el centro de tal flujo de cambios y Significación.

En esa complejidad vivimos sin darnos cuenta, una guerra de Cuarta Generación tan difusa como inconclusa. La tecnología, es el arma vital que a quemarropa quiere cambiar el mundo. 

Ayer, hoy y siempre, la televisión ha sido un instrumento de Video política: Hacer política desde los estudios de tv y desde los documentales donde hemos dejado de leer para aprender historia con la rapidez y los destellos audiovisuales que no nos dejan pensar, los canales de historia, nos dan una versión de ella, sin que la tv esté pendiente de que quien consume sus programas verifique si esa “tele versión” es real; los flujo de cambio se transforman: De la ciudad letrada a la ciudad virtual: la dinámica tiempo espacio prefiere la tv a los libros. Esta determinación, es la que debemos cambiar de manera tal que el ser humano a partir del fenómeno del covid 19, sea más empático con su prójimo.

Empatía es otra forma de llamar a la otredad: ser sensible al otro y esa es la transformación, que muchos esperan cuando el mundo retome su normalidad cotidiana, que obviamente nunca ha sido empática, sensible reciproca o humanista. Por el contrario seres humanos utilizan empatía u otredad para todo menos para el apoyo solidario, esto dado gracias a la economía o Hiper industria cultural. Hemos de revisarnos, si, pero no desde el punto de vista de los hitos o de la estética, sino desde la entrega o el compañerismo, puesto que la falta de compañerismo ha impactado en su realidad a la Comunidad Internacional.

Sabemos que este cambio de conceptos que  sin quererlo el Covid nos hace retomar, no es fácil de entender desde el enfoque que tiene el presente escrito, sin embargo les dejamos algunas pistas:

Estamos en una guerra de supervivencia (en la que no estamos de acuerdo)

El pensamiento Crítico genera inquietudes e ideas para la transformación social.

Esto puede redundar en beneficio, de un entorno laboral favorable en función de que nuestra Comunicación Humana desde adentro, sea asertiva. 

 


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