LA VUELTA DEFINITIVA (CHILE)

LA VUELTA DEFINITIVA… DICIEMBRE 2013.

Michelle Bachellet, Presidenta de la República de Chile.

Resultado previsible el encabezado de esta reflexión, repite un modelo cuya pretensión es astronómica en gran medida.

Conociendo un poco de la idiosincrasia chilena, no había muchas opciones en este "novedoso" pero interesante proceso electoral, acotamos lo novedoso pues a partir de esta elección, la votación en Chile NO ES OBLIGATORIA, puede ser por eso entonces que fue notorio el nivel de abstención de los votantes chilenos, pues ya sabían el resultado.

Luego del anterior párrafo lleno si se quiere de un lugar común, nos toca aterrizar en el inmediato presente: el reto que se le presenta a la nueva presidenta chilena, como respuesta al tejido social, sus hechos y el movimiento en sí mismo que la llevo de nuevo al poder.

Pueden decir que los resultados de la actual elección presidencial, se deben a la madurez política del pueblo chileno (de nobleza indiscutible) más sin embargo, y promoviendo el pensamiento crítico en el análisis, siendo prudentes anunciamos que se debe a un desgaste en el discurso derechista, expresado en un cansancio ciudadano siempre impregnado de una sociedad mercantilista.

El cansancio ciudadano presento hace ya bastante tiempo, gritos por el cambio, una lucha por la verdadera gratuidad de la educación en la práctica invisible, reconocimiento a genuinos derechos estudiantiles por mejorar y ser incluidos plenamente en su sociedad, la amplitud social que exige una asamblea constituyente, que les permita olvidarse totalmente de una sombra de dictadura  que ha massmediatizado a los chilenos de bién, que hay muchos en ese país y un punto  no menos importante: la votación de chilenos en el exterior, hasta ahora improcedente y es una lucha vigente.

No la tiene fácil la Presidenta Bachellet, con todo el escenario aquí planteado y seguramente nos quedamos cortos. No obstante, como analista Internacional, les recuerdo hay un plazo llamado el TIEMPO DIPLOMÁTICO, para observar con prudencia, si verdaderamente Bachellet tiene la voluntad y el consenso político suficiente para consolidar la transformación político social que le pide el nuevo Chile.... La pretensión astronómica.